Las nornas (nórdico antiguo: norn, plural: nornir) son dísir (plural de "dís", un espíritu femenino) de la mitología nórdica. Tres de ellas son las principales, conocidas por los nombres de Urðr (o Urd, "lo que ha ocurrido", el destino), Verðandi (o Verdandi, "lo que ocurre ahora") y Skuld ("lo que debería suceder, o es necesario que ocurra"). A Skuld también se la podía ver cumpliendo el rol de Valquiria. Según las Eddas existen también muchas otras nornir menores asociadas a individuos en particular. Las nornas viven bajo las raíces del fresno Yggdrasil, el árbol del mundo en el centro del cosmos, donde tejen los tapices de los destinos y riegan el fresno con las aguas y la arcilla provenientes del pozo de Urd para que éste no pierda su verdor ni se pudra. La vida de cada persona es un hilo en su telar, y la longitud de cada cuerda es la duración de la vida de dicha persona
Valquirias
Eran deidades sobrenaturales que servían al dios principal de la mitología nórdica, Odín. Su misión era conducir a los héroes que mueren en las luchas al Valhalla, una fortaleza que está en el palacio de Odín, para que ayudasen al dios en su guerra del fin del mundo conocida como Ragnarök.
Tienen el aspecto de una joven y bella guerrera nórdica; alta, con marcada musculatura, ojos grandes y azules, cabello rubio, largo y trenzado. Les gusta ir ataviadas con cascos de guerra con cuernos.
Eran deidades sobrenaturales que servían al dios principal de la mitología nórdica, Odín. Su misión era conducir a los héroes que mueren en las luchas al Valhalla, una fortaleza que está en el palacio de Odín, para que ayudasen al dios en su guerra del fin del mundo conocida como Ragnarök.
Tienen el aspecto de una joven y bella guerrera nórdica; alta, con marcada musculatura, ojos grandes y azules, cabello rubio, largo y trenzado. Les gusta ir ataviadas con cascos de guerra con cuernos.
Fenrir o Fenris, en la mitología nórdica, es uno de los tres monstruos que nacieron de la unión entre Loki y Angrboda. Los otros dos fueron Hel, la diosa de la muerte, y Jörmungandr, la serpiente gigante.
Dos veces fallaron los dioses en su intento por apresarlo: primero con la cadena Leding y después con la todavía más fuerte Droma, de las que se liberó fácilmente.
Los dioses del Asgard pidieron la fabricación de una ligadura irrompible a los enanos. Éstos les fabricaron una cinta liviana, dulce, sedosa y fina, que sin embargo nadie podría romper, pues estaba fabricada con el sonido de la pisada del gato, la barba de la mujer, las raíces de la montaña, los nervios del oso, el soplo de los peces y la saliva del pájaro.
La razón de este encadenamiento es que los Ases saben que será causante del fin del mundo. En el Ragnarök, cuando rompa su prisión milenaria y se libere de sus cadenas, el fuego y el agua subterráneas invadirán la Tierra. Matará a Odín y lo matará Vidar.
Los dioses del Asgard pidieron la fabricación de una ligadura irrompible a los enanos. Éstos les fabricaron una cinta liviana, dulce, sedosa y fina, que sin embargo nadie podría romper, pues estaba fabricada con el sonido de la pisada del gato, la barba de la mujer, las raíces de la montaña, los nervios del oso, el soplo de los peces y la saliva del pájaro.
La razón de este encadenamiento es que los Ases saben que será causante del fin del mundo. En el Ragnarök, cuando rompa su prisión milenaria y se libere de sus cadenas, el fuego y el agua subterráneas invadirán la Tierra. Matará a Odín y lo matará Vidar.
Jörmundgander
Jörmundgander o Jörmungandr, también llamada la "Serpiente de Midgard" , es una gigantesca serpiente que ronda Midgard hasta el día del Ragnarök. Es un monstruo masculino. Tiene al dios Loki como padre y a la giganta Angrboda como madre, y cuando los Æsir se enteraron de este ser maligno engendrado por tan terribles padres, y vieron con su don de la adivinación las cosas terribles que haría, decidieron encargarse del monstruo. Odín lo lanzó al mar que rodea Midgard, donde quedará atrapado hasta el Ragnarök, el día de la destrucción total.
Su último encuentro ocurrirá con la llegada del Ragnarök ("el destino de los regentes/dioses"), cuando Jörmundgander se arrastrará fuera del océano y envenenará los cielos. De sus fauces pululará el veneno y reptará entre el fuego de los gigantes hasta el lugar donde se halle Thor para luchar contra su némesis y aquel que tantas veces la había intentado cazar. Éste la matará y entonces caminará nueve pasos antes de caer muerto víctima del veneno de la serpiente.
Kraken
Kraken
Su aspecto se asemeja al de un pulpo gigante con numerosos tentáculos y unos enormes ojos rojos con los que controla cualquier movimiento de otras criaturas, tanto dentro como fuera de las aguas. Sus tentáculos tienen unas ventosas de unos 2 metros de diámetro. Tiene también dos tentáculos especiales, recubiertos de lengüetas afiladas, que usa para atacar.
Como cualquier cefalópodo, el kraken es capaz de expulsar tinta negra para escapar de sus enemigos, aunque cuesta pensar que un ser como éste necesite escapar, excepto de otro kraken furioso. Ni el mismísimo leviatán es comparable en fuerza o en tamaño.
Como cualquier cefalópodo, el kraken es capaz de expulsar tinta negra para escapar de sus enemigos, aunque cuesta pensar que un ser como éste necesite escapar, excepto de otro kraken furioso. Ni el mismísimo leviatán es comparable en fuerza o en tamaño.
Ljósálfar.
Los elfos (Ljósálfar) son criaturas de la mitología nórdica y germánica. Originalmente se trataba de una raza menor de dioses de la fertilidad y representados como hombres jóvenes y mujeres de gran belleza que viven en bosques, cuevas o fuentes. Se les consideraba como seres de larga vida o inmortales y con poderes mágicos.
Se los describe como seres semi-divinos asociados a la fertilidad y el culto a los ancestros. De esta forma, la noción de elfo se asemeja a la creencia animista en espíritus de la naturaleza y de los muertos,
Los elfos oscuros (nórdico antiguo Dökkálfar o Svartálfar elfos oscuros y elfos negros respectivamente, negros refiriéndose al color de cabello y no a la piel) son unas criaturas de la mitología nórdica que residen bajo tierra con características similares a los enanos (duergar) y son la contraparte de los elfos de la luz, los Ljósálfar.
En mitología nórdica, Arvak y Alsvid (cuyos nombres significan "madrugador" y "muy veloz" respectivamente) eran los caballos que tiraban del carro de la personificación del Sol. La melena de los caballos emitía la luz; y la propia diosa Sól proporcionaba el calor.
La mitología narra que los dioses regulaban el paso de los días y las noches, así como las estaciones. Sól, la diosa del sol, hija de Mundilfari y esposa de Glen, cabalgaba todos los días a través de los cielos en su carro, tirado por dos caballos llamados Alsvid y Arvak. Sól es cazada durante el día por Skoll, un lobo que quiere devorarla; los eclipses solares representan que Skoll casi la atrapó. Está destinado que Sköll, algún día, va a atrapar y devorar a Sól, quien será reemplazada por su hermano, Máni (la Luna, palabra que en las lenguas germánicas es masculina). La historia narra que Mani es cazado por Hati, otro lobo. La tierra está protegida del calor total del sol por el escudo Svalin, que se encuentra ante ella.
Aparte de Sleipnir, el corcel de ocho patas de Odín, y Gulltoppr, que pertenece a Heimdal según la Edda prosaica, no se conocen más detalles, ni siquiera sobre sus propietarios. Los nombres también aparecen en þulur.
Otros caballos también se mencionan en diversas fuentes:
Otros caballos también se mencionan en diversas fuentes:
- Arvak y Alsvid, los corceles que arrastran el carro de la personificación del Sol.
- Blóðughófi, que pertenece a Freyr (según Kálfsvísa)
- Gullfaxi aparece en Skáldskaparmál (17), que perteneció a Hrungnir, pero fue regalado a Magni por su padre, el dios Thor, tras matar al jotun.
- Hófvarpnir, sobre la que cabalga Gná (Gylfaginning, 35).
- Skinfaxi y Hrímfaxi, que pertenecen a Dagr (Día) y Nótt (Noche).
- Svaðilfari, un semental que se apareó con Loki (disfrazado de yegua) y engendró a Sleipnir.
Referencias:
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